En el año 2006 fue capturado a balazos y acusado de ser uno de los secuestradores más peligrosos de Lima. Once años después, Ángel Enrique Paz Córdova (38), ‘Chino’, se convirtió en un activo integrante de una facción de construcción civil, pero ayer fue asesinado de 10 balazos por dos sicarios que lo acribillaron delante de sus tres hijos, con los que cenaba en una pollería en Ventanilla.
Era alrededor de la medianoche de ayer cuando dos jóvenes, con las cabezas cubiertas con capuchas de sus poleras, ingresaron al restaurante ‘Jala jala’, en la Mz. O, lote 8 del asentamiento humano ‘Luis Felipe de las Casas’, en el distrito chalaco de Ventanilla.
FALSOS CLIENTES
“Se acercaron al mostrador simulando que iban a pedir algo, pero luego sorpresivamente sacaron sus armas y se acercaron a la mesa de uno de los clientes que estaba con tres menores. Le dispararon varias veces, sin importarles los chicos, pero el hombre reaccionó rápido y los protegió”, dijo una trabajadora en Ventanilla.
Tras cometer el crimen, los asesinos salieron corriendo del local, mientras la víctima murió en el lugar. Los clientes huyeron desesperados del restaurante y los empleados llamaron a la policía.
UN ARMA
Media hora después llegaron los detectives, quienes al inspeccionar la zona descubrieron que uno de los criminales había arrojado su arma en un parque cercano.
Del occiso se informó que registraba antecedentes por secuestro, robo agravado y tenencia ilegal de armas. “Hace 10 años perteneció a la banda ‘Los Secos del Norte’ y fue capturado tras una balacera en San Borja. Ahora estuvo metido en un grupo de construcción civil y se sospecha que el ataque haya sido por la guerra en las obras de construcción”, dijo un detective.
De los tres menores se indicó que resultaron ilesos y fueron entregados a los familiares de la víctima. (Edgar Cirilo)
