Tres escolares quedaron gravemente heridos al ser atropellados por descontrolado auto, cuyo conductor, habría mandado comprar el SOAT luego del accidente, en Ate.
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Según las imágenes de la cámara de videovigilancia del municipio de Ate, los menores de 13 y 16 años estaban a la 1:12 de la tarde en la avenida Alfonso Ugarte, frente del estadio Ollantaytambo, en Vitarte. Esperaban la combi que los llevaría hasta su vivienda. Solo estaban algunos minutos en ese lugar cuando la desgracia rondó sus vidas.
Tres escolares fueron atropellados en paradero.
El descontrolado auto Nissan de placa BF-3479 se despistó unos metros más adelante e invadió el carril contrario. Siguió su recorrido y subió a la vereda donde embistió a los escolares. EL conductor Grover Piñas Canchanya (55), continuó la marcha en sentido contrario y luego volvió a su carril derecho y se detuvo a unos metros.
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Tres escolares fueron atropellados en paradero. (foto: Mónica Rochabrum/trome)
Personal de la central de monitoreo del municipio de Ate, avisó a su equipo de serenazgo, paramédicos y policías, quienes llegaron al lugar y ayudaron a trasladar a los escolares heridos al hospital de Emergencias de Vitarte.
El hombre permaneció en el auto y minutos más tarde fue intervenido por los policías de la comisaría de Vitarte.
Los indignados familiares de los menores indicaron que el chofer no tenía SOAT y al parecer estaba ebrio, pero este último detalle fue negado por la policía con el resultado del dosaje etílico, que arrojó negativo para consumo de alcohol en el causante del accidente.
“Mi hija tiene fractura de tobillo izquierdo y necesita operación. No sabemos qué hacer porque el carro no tenía SOAT, lo compraron después del accidente”, dijo Willliam Llantoy, padre de la adolescente de 16 años.
El otro adolescente de 16 años tiene fractura de fémur, tibia y peroné. “Los médicos dijeron que no lo pueden operar en este hospital así que estamos viendo el traslado a otro nosocomio o clínica porque tiene que ser sometido a varias operaciones. Ambas familias estamos en esos trámites y necesitamos ayuda porque el SOAT fue comprado después del accidente”, dijo una tía del escolar. Ambos menores cursan el quinto año de secundaria.
La cuarta herida, que sería una profesora, viajaba en el auto que provocó el accidente. “Ella es profesora y sabe lo qué pasó. Debería dar su declaración, pero nos hemos enterado que no lo va a hacer. Los policías deberían citarla porque los más perjudicados son los tres escolares atropellados”, refirieron los familiares de los alumnos del colegio 0026 Aichi Nagoya.
