Alexander Pérez Gutiérrez, alias ‘Gringasho’, condenado por tenencia ilegal de armas de guerra, busca salir en libertad antes de 2028 tras solicitar un beneficio penitenciario ante el Poder Judicial.
El temido sicario se encuentra actualmente en el penal de Challapalca, uno de los más rigurosos del país, ubicado en la región Tacna.
La defensa de ‘Gringasho’ presentó su pedido en 2025 bajo la figura de redención de pena, que permite reducir años de condena por realizar actividades laborales o educativas dentro del penal.
El caso está en proceso de evaluación por parte del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) y el Poder Judicial, aunque los requisitos para acceder a este beneficio son exigentes en el régimen cerrado especial.
Una situación similar ocurrió con Jhon Smith Cruz Arce, conocido como ‘Jhon Pulpo’, quien fue liberado este mes tras recibir una resolución favorable de habeas corpus.
El exlíder de ‘Los Pulpos’ fue sentenciado a 25 años por doble homicidio, pero obtuvo su libertad luego de que se validaran sus actividades en prisión como parte de su redención.
‘Gringasho’ es recordado por ser uno de los sicarios más jóvenes del país. A los 12 años integró la banda criminal “Los Malditos de Río Seco” en Trujillo y fue acusado de varios asesinatos. En 2010 fue detenido por el crimen de una mujer embarazada, pero quedó libre por falta de pruebas. Un año después fue sentenciado como menor infractor por el asesinato de tres personas.
Durante su etapa en centros juveniles, protagonizó dos fugas: la primera en Trujillo y la segunda en Lima. Tras cumplir su condena, salió en libertad en 2017, pero fue recapturado menos de un año después en El Porvenir, La Libertad, portando armamento de uso militar.
En 2018, el Poder Judicial lo condenó a diez años por tenencia ilegal de armas. Desde entonces, permanece en Challapalca bajo régimen cerrado especial, destinado a internos de alta peligrosidad. Su perfil reincidente fue uno de los factores clave para su traslado a este penal.
La figura de redención de pena permite restar un día de condena por cada siete días de trabajo o estudio. Sin embargo, según estimaciones difundidas por el programa Ocurre Ahora, ‘Gringasho’ necesitaría acreditar más de 21 años de actividad para descontar los tres años restantes, un cálculo que pone en duda la viabilidad del beneficio.
El Ministerio de Justicia regula este tipo de beneficios, aunque reportes previos han revelado posibles irregularidades en su aplicación. En algunos casos, internos han presentado documentos sin respaldo sólido, lo que ha despertado sospechas de corrupción o favores dentro del sistema penitenciario.
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