¡Estaba obsesionado! El asesinato de Heidy Lizbeth Peña Lázaro conmocionó a la provincia de Cañete en el año 2024, al tratarse de un feminicidio cometido por su expareja, en un contexto de violencia previa que, según las investigaciones, ya había sido denunciado por la víctima.
El hallazgo fue realizado por pescadores de la zona, quienes advirtieron la presencia de restos humanos en avanzado estado de descomposición y dieron aviso inmediato a las autoridades. El cuerpo había sido arrastrado por el mar hasta la orilla.
Según se informó, el cadáver fue encontrado en un punto cercano a la desembocadura del río Mala y se encontraba incompleto, ya que no tenía extremidades ni cabeza. Las circunstancias del caso vienen siendo materia de investigación.
Un nuevo caso de feminicidio se registró en la provincia de Cañete en el año 2024, luego de que Heidy Lizbeth Peña Lázaro fuera asesinada por su expareja, quien no habría aceptado el fin de la relación, según informaron fuentes policiales.
Según los reportes policiales, la víctima fue reportada como desaparecida días antes del hallazgo. Posteriormente, pescadores y personal de rescate alertaron sobre la presencia de un cadáver femenino flotando en el mar, lo que activó un operativo conjunto para la recuperación del cuerpo y su traslado a tierra firme.
Efectivos de la PNP y representantes del Ministerio Público realizaron el levantamiento del cadáver, que fue derivado a la morgue para la necropsia de ley, la cual permitió confirmar la identidad de la víctima y determinar que la muerte se produjo en circunstancias violentas.
Las investigaciones apuntan a que Heidy Lizbeth Peña Lázaro habría sido asesinada por su expareja, con quien mantenía antecedentes de conflictos y presunta violencia previa. El sospechoso fue intervenido y puesto a disposición de la Fiscalía.
Según ‘América Televisión’, la policía llegó a notar actitudes extrañas en Abel Chilipo Damián tras ser detenido, por lo que decidieron interrogarlo. Sin remordimiento, el sujeto aceptó ser el autor del asesinato.
“Sé que se me pasó, la ahorqué con las manos. La descuarticé en la playa”, con absoluta frialdad aceptó haber asesinado a su esposa.
De acuerdo con información recabada por la PNP en la Comisaría de Chilca, el padre de la víctima acudió a reconocer el cadáver en compañía de Chilipo. Durante el procedimiento, el comportamiento atípico del sujeto despertó las alertas de los agentes, lo que derivó en su intervención y posterior confesión.
“El día 14 llega al domicilio de la víctima, llega las 2 de la tarde aproximadamente y la ahorca porque estaba sola. La lleva su motocar y la deja ahí hasta horas de la noche. En la noche, la lleva hacia la playa, ahí la desmembrada y la arroja al mar. Refiere con la intención de que el mar se la lleve otro lado”, mencionó el Coronel PNP Manuel Lozada, jefe de la División Policial Lima Sur, al citado medio.
El hecho ha causado profunda consternación en la población de Mala, reavivando la alarma por el incremento de los casos de feminicidio en el país. Las autoridades mantienen abiertas las investigaciones para determinar con precisión cómo ocurrieron los hechos y establecer las responsabilidades correspondientes.
La víctima fue una persona, alegre y trabajadora, que solo quería rehacer su vida luego de su separación del padre de sus hijo. Aunque ya no estaban juntos, los celos enfermizos de Abel no cesaban. La seguía controlando, la vigilaba y la amenazaba, porque no aceptaba el fin de la relación.
“Pero quiere estar acá viniendo y yo le dije normal como padres, pero conmigo ya no. Pero no acepta, no me deja salir, me quiere encerrar. Dice que me vaya de mi casa, hasta me quería denunciar, me quita la moto”, se lee en el chat que tuvo Heidy con un familiar.
En sus últimos días, la víctima compartía con su familia la desesperanza y angustia de vivir con su agresor, ya presentía un desenlace trágico. En medio de una fuerte discusión, Abel la atacó dentro de su vivienda.
En mayo de 2024, el Poder Judicial dictó prisión preventiva por un periodo de 9 meses contra Abel Chilipo Damián. Esta medida se tomó para asegurar su presencia durante las investigaciones tras su detención en Cañete.
El imputado confesó ante las autoridades haber asesinado y posteriormente, intentado ocultar el cuerpo de la víctima en un descampado en la zona de Mala.
Se le procesa por feminicidio, un delito que en el código penal peruano conlleva penas severas, que podrían alcanzar la cadena perpetua dependiendo de los agravantes.
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