Un desalmado sujeto asesinó a la madre de sus tres hijos y luego arrojó su cuerpo en un descampado en la carretera hacia La Islilla, en la provincia de Paita, en Piura. El feminicida confesó su crimen, aparentemente, cegado por los celos y el rechazo de la víctima que se negaba a volver con él.
El hallazgo del cadáver de la madre de familia identificada como Maritza Rivas Martínez, ocurrió la mañana de ayer, en un camino hacia La Islilla, hasta donde llegaron efectivos policiales del Área de Homicidios del Depincri de Sullana, junto a Serenazgo y miembros de la comisaría de Paita.
FEMIICIDA CONFESÓ CRIMEN
Los agentes lograron ubicar el lugar luego que el presunto feminicida Saúl Pizarro Añazco se entregó, la noche del último miércoles, en la comisaría del sector y confesó el hecho. Se supo que el cuerpo de la mujer solo tenía puesto un pantalón color rosado. Tras ello, el representante del Ministerio Público dispuso que el cuerpo sea internado en la morgue para que le realicen la necropsia de ley.
Según las investigaciones de la Policía, el hombre estranguló a la madre de sus hijos en el inmueble de la manzana B, lote 16 del asentamiento humano Rey de Reyes, en Paita Alta, donde ella habría ido a recoger su ropa y otras cosas. Luego en un vehículo, trasladó el cadáver y lo arrojó en un descampado.
Darwin Rivas, hermano de la víctima, pidió cadena perpetua para el asesino. “Ella vivía acá (en Sullana), con engaños la habrá llevado (a Paita), porque estaban separados. Lo que pido es que se haga justicia y que pague con la máxima pena”.
La víctima deja tres hijos de 15, 12 y 8 años. Ella es velada en su casa de la calle Félix Jaramillo 728 de El Obrero.