Corría el mes de julio de 2012 cuando los peruanos seguían con asombro y terror las noticias sobre el hallazgo de dos maletas con restos humanos en Huacho y La Victoria. Un ajuste de cuentas entre narcotraficantes fue lo primero que se pensó. Pero pronto las investigaciones determinaron que se trataba del cuerpo de Enrique Rosendo Armestar Anci (26). ¿El asesino? Su pareja, el periodista, Ricardo Vásquez Mori (35), quien fue condenado a 30 años de cárcel. Esta es su historia.
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Cuando Vásquez Mori leyó los diarios y vio los noticieros que informaban que los miembros desmembrados encontrados serían producto de un ajuste de cuentas entre narcotraficantes, pensó que había cometido el crimen perfecto. Sin embargo, había incurrido en varios errores.
Y es que el periodista había sido filmado cuando abordó y descendió del bus llevando la valija con rueditas y, en un exceso de confianza, se identificó con su verdadero nombre para viajar.
“Las maletas eran iguales y las hallaron cerca a los terminales de la empresa de transporte de Huacho y La Victoria. Luego que los peritos nos dieron las horas de fallecido de la víctima, buscamos y observamos varios días los videos. Hasta que, por fin, encontramos a un sospechoso y al pedir la lista de pasajeros ubicamos el nombre de Ricardo Vásquez Mori y su DNI”, contó a Trome uno de los detectives que investigó el caso.
Los detectives consultaron entonces en la División de Desaparecidos y descubrieron que unos padres de familia buscaban a su hijo Enrique Armestar Anci (26) (cuyo verdadero apellido era Almestar porque un funcionario se equivocó al inscribirlo en el Reniec). Ellos dijeron que no había llegado desde el sábado 21 de julio y había ido a visitar a un tal Ricardo Vásquez. Armestar Anci era parte de la organización ‘Todo Mejora’, que lucha contra la violencia hacia los homosexuales y contra el bullying.
“Fuimos al departamento del periodista en Breña. Un vecino reconoció la foto de Enrique Armestar y dijo que al joven lo habían visto frecuentar la casa del sospechoso. Íbamos por buen camino. Luego, el 25 de julio acudimos a su trabajo a buscarlo, pero había renunciado. Nos enteramos que estaba en Pucallpa”, narró el agente.
De inmediato un equipo de detectives viajó a esa ciudad, lo ubicó y detuvo. “Aquí en Lima, quiso engañarnos diciendo que había conocido a su víctima porque ofrecía sus servicios de masajista por Facebook, así como que se había muerto del corazón la mañana del domingo 22 y lo descuartizó para que nadie sepa que él era homosexual. Pero desbaratamos todo eso, porque descubrimos que Ricardo conoció a Enrique por medio de una página web de homosexuales y, sobre las horas de muerto, comprobamos científicamente que al joven lo mataron la madrugada del lunes”, explicó el perito.
Ricardo Vásquez Mori, sentenciado a 30 años de prisión. (USI)
ESTABA CON VIDA
Para los detectives de Homicidios, estaba claro que Ricardo Vásquez lo planeó todo. “Nadie que está en shock o desesperado -como dijo él- sale a buscar una sierra, y luego descuartiza con cortes precisos y exactos a su amigo. No descartamos que haya tenido un cómplice que lo ayudó”, detalló el investigador.
“Para nosotros, lo planeó todo, porque el otro lo iba a dejar. Lo citó, lo “pepeó” (adormeció), lo tuvo a su merced 12 horas. Estuvo maniatado y lo estranguló para luego cortarlo. Hizo desaparecer los brazos, piernas y cuello, porque allí iban a aparecer las marcas de las cuerdas que determinaban el asesinato, pero igual hemos comprobado que fue un crimen y no un ajuste de cuentas de narcotraficantes como él quiso que creyéramos”, añadió.
Por los rastros de sangre encontrados en las paredes, en el lavatorio y en la cocina del departamento del descuartizador –ubicado en Breña–, se podría concluir que Enrique Armestar fue seccionado cuando aún estaba con vida.
Vásquez Mori descuartizó el cuerpo de Enrique Armestar Anci. (USI)
CAPTURA Y CONFESIÓN
Cuando se enteró de que el 24 de julio un mototaxista de Huacho había hallado una valija con la pelvis de su víctima, y que a los dos días fuera encontrado un tórax en un basural de La Victoria, decidió escapar y refugiarse en Pucallpa, donde tiene varios familiares.
Ahí el sujeto fue capturado por la Policía, quienes le siguieron el rastro luego de que los parientes del descuartizado denunciaran su desaparición y sindicaran a Vásquez como presunto responsable pues, según indicó Enrique Armestar padre, “este hombre molestaba a su hijo”.
Otra pista clave dentro de la investigación para atrapar al descuartizador fueron los videos de seguridad de la empresa de transporte San Martin de Huacho, lugar al que viajó el 24 de julio, a las siete de la noche.
En su manifestación policial, el periodista afirmó que la víctima se sintió mal, se desvaneció y falleció de un paro cardíaco en su departamento.
En ese momento, entró en pánico, se desesperó y cercenó su cuerpo con una sierra eléctrica para que no lo responsabilicen por su muerte. Luego, decidió colocar las partes descuartizadas en maletas, las que abandonó en diversos lugares.
Aseguró había enterrado la cabeza de su víctima cerca de unos mausoleos del cementerio el Ángel, ubicado en el Centro de Lima.
HIPÓTESIS
Para la Dirección de Investigación Criminal, la versión brindada por el presunto homicida no era real pues –según dijeron– hay información que revelaría que ambos mantenían una relación sentimental.
Días antes del crimen, el fallecido le reveló a Vásquez Mori que ya no quería continuar con él. Esto habría provocado sus celos, pues presumía que había una persona que se interponía entre ellos. Este sería la causa del horrendo homicidio.
Sin embargo, esta información fue negada por los padres y primos del muchacho asesinado. Ellos aseguran que no había nada entre ambos y que, por el contrario, el sujeto venía acosando desde hace semanas a la víctima.
Además, Enrique Armestar padre cree que en el asesinato de su vástago participó más de una persona. “Es imposible que haya actuado solo. Mi hijo medía 1.72, pesaba casi 100 kilos. Era más grueso que él (que Vásquez)”, refirió.
También desestimó la hipótesis del infarto. “Es imposible que haya sufrido un ataque cardíaco ya que hace menos de un mes se sometió a exámenes de riesgo quirúrgico en Essalud porque se iba a someter a una operación del páncreas”, expresó.
Ricardo Vásquez Mori fue sentenciado a 30 años de cárcel por el asesinato de Enrique Armestar Ansi, ocurrido en julio del 2012.
SÁDICO E INMADURO
Finalmente, en diciembre de 2013, Vásquez Mori fue condenado a 30 años de cárcel. Se descartó que Armestar Anci haya muerto por un ataque al corazón, como dijo el asesino, quien era su pareja sentimental. Se tomó en cuenta que Vásquez Mori es consciente de sus actos y que se trata de una persona inmadura, sádica, insegura y egocéntrica, con conductas de alto riesgo.
Fuentes de la División de Investigación de Homicidios de la Dirincri informaron que los peritos forenses habrían concluido que, al momento del descuartizamiento, Armestar Anci “presentaba signos de vida en los tejidos blandos de partes del cuerpo”.
“Todo hace indicar que la víctima estaba inconsciente cuando fue cercenada”, refirió uno de los investigadores, quien también precisó que, pese a estas conclusiones, la causa de la muerte sería “imprecisable debido al avanzado estado de descomposición”.
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