Alexander Salazar Álvarez, el cuartelero venezolano del hospedaje Señor de Sipán (San Martín de Porres) y uno de los tres detenidos acusados del descuartizamiento del peruano Jafet Torrico Jara y el venezolano Rubén Matamoros Delgado, rogó a sus custodios permanecer en la carceleta porque temen que lo asesinen en la calle.
En un informe de Panorama, donde se detalló cómo fueron asesinados Jafet Torrico Jara y Rubén Matamoros Delgado, el cuartelero extranjero no habría querido salir de prisión por el temor que lo asesinen.
El extranjero había sido expulsado del Perú hace unas semanas junto a un grupo de venezolanos, pero sorpresivamente logró ingresar nuevamente a nuestro país y se encontraba de forma ilegal.
Según las investigaciones de la Policía, Salazar Álvarez trabajaba y vivía en el mencionado hospedaje. Incluso, se alojaba en una habitación del quinto piso, donde ocurrió el doble crimen.
Unas imágenes captadas por cámaras de seguridad mostraron cuando Alexander Salazar Álvarez aparece en el hospedaje la madrugada del lunes pasado, cuando cuatro personas, incluidas dos mujeres, bajan las bolsas donde estaban los restos de Jafet Torrico Jara y Rubén Matamoros Delgado.
El Juzgado de Investigación Preparatoria Permanente de Condevilla ordenó la detención preliminar por el plazo de siete días contra Salazar Álvarez, por el delito de homicidio calificado por el doble crimen en el hostal de San Martín de Porres. Sin embargo, el venezolano quiere quedarse en la carceleta.
Los otros sospechosos en el descuartizamiento de las dos víctimas son los venezolanos Verónica Andreina Montoya Araujo, alias 'Roxy', y Angelbert Alejandro Díaz Colina.
Montoya Araujo fue capturada en la madrugada del sábado por el frontis de una discoteca de la avenida La Marina, en Pueblo Libre.
La División de Investigación de Homicidios y de Inteligencia Contra la Criminalidad está investigando si la extranjera está involucrada en el caso, aunque fue capturada en Perú debido a un presunto homicidio en su país natal.
Por su parte, Díaz Colina, es quien habría grabado con un celular las voces de los asesinos del venezolano Rubén Matamoros Delgado y el peruano Jafet Torrico Jara. Este sujeto, capturado cerca del cuarto que alquilaba con su pareja, también habría sido filmado por las cámaras de seguridad del hostal en San Martín de Porres.