NUNCA SE ARREPINTIÓ. La Policía reveló que en la habitación 303 del hostal Las Perlas, en San Juan de Lurigancho, donde se halló el cuerpo sin vida del suboficial Darwin Condori Antezana, se encontró también una carta escrita a mano presuntamente por él en la que se despedía de sus familiares sin mostrar arrepentimiento por el crimen de la joven Sheyla Cóndor. ¿Qué decía la misiva?
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Según describieron los investigadores, antes de quitarse la vida, Condori dejó un mensaje escrito a mano, firmó las hojas y las colocó cuidadosamente en un aparador, junto a la puerta de su habitación. Encima de las páginas, reposaba su placa de policía y otros documentos.
“Las pesquisas que están desarrollándose dan cuentan de que hay una carta, en donde se despide de sus familiares, pero para mí, por la experiencia que tengo, esta persona denota un perfil criminal, porque nunca se arrepiente de lo que hace con Sheyla, solo se despide de su familia”, manifestó el coronel Ricardo Espinoza Cuesta, jefe de la División de Investigación de Homicidios.
El coronel indicó que esa es la información que manejan hasta el momento, y que, posteriormente, se va a confirmar con las pericias de grafotecnia y el informe final de necropsia.
“Lo único que le quedó fue decidir quitarse la vida. Las características de esta segunda escena, constituida por el suicidio, refuerzan el análisis. Encontramos una carta en la que se despide de sus familiares, pero eso será confirmado con las pericias grafotécnicas y los informes finales”, repitió.
Darwin Marx Condori Antenaza, policía sindicado como el principal sospechoso tras la desaparición, asesinato y desmembramiento de Sheyla.
ESCENA DEL CRIMEN CONTAMINADA
En la habitación de hotel en San Juan de Lurigancho también se encontraron algunas pertenencias personales de Darwin Condori. Entre ellas se puede visualizar su DNI, su acreditación de la PNP, su placa y su chaleco.
Además, según las imágenes difundidas por la televisión, se pudo ver a los agentes policiales moviendo el cuerpo del suboficial, el cual encontraron colgado de un rack de televisión, en medio de abundantes manchas de sangre, lo que despertó críticas hacia la labor de las autoridades.
“Se ha actuado de manera uniforme y todo en conjunto. Por eso entiendo que los policías que han intervenido en San Juan de Lurigancho, lo que han hecho es abordar rápidamente la escena. Si se ha cumplido el protocolo o no, se va a observar. Lo concreto es que hay una vida que se ha perdido, y (para mí) es un suicidio. Pero ya lo confirmaremos”, manifestó al respecto el coronel Espinoza.
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