NEGOCIO MILLONARIO. Edison Flores podría estar más implicado de lo que se pensaba en la investigación de lavado de activos relacionada con el presentador de televisión Andrés Hurtado y sus cuñados, Roberto e Iván Siucho Neira, con quienes no solo lo une no solo un vínculo familiar sino también la millonaria adquisición de un terreno en Lurín.
Según documentos de Registros Públicos difundidos por Panamericana, el futbolista y su esposa, Ana Siucho, poseen un terreno de más de 21 000 metros cuadrados en Lurín, adquirido en 2020 por 918 mil 400 dólares (casi 3 millones y medio de soles) .
En la ficha registral, se detalla que ‘Orejas’ y Ana tienen un 25% de las acciones, mientras que Taotao Xiao (el nombre chiono de Roberto Siucho) posee el 50%. Además, Iván Siucho junto a su esposa Melisa Penoy se registran con el 12,5%. Por su parte, la inmobiliaria Nazca, de propiedad de Iván Siucho, cuenta con el otro 12,5%.
El predio alberga un crematorio y un cementerio de automóviles, con un letrero que advierte sobre la propiedad privada.
Poco después de la compra, el predio fue hipotecado a favor de Flora Rosa Salazar Lujan por la suma de un millón 900 mil dólares, lo que ha levantado sospechas sobre las actividades económicas de la familia Siucho.
Cabe recordar que la Segunda Fiscalía Especializada en Delitos de Lavado de Activos ha solicitado el testimonio y una lista de bienes de Edison Flores, en el marco de una investigación que también involucra a Andrés Hurtado.
Por su parte, Ana Siucho acudió a la sede del Ministerio Público, en la avenida Abancay, el pasado martes 17 de setiembre para dar su declaración en calidad de testigo en el caso de lavado de activos y tráfico de influencias que implica al polémico ‘Chibolín’, detenido el último jueves 19 en una clínica local.
Según informó Amor y fuego este miércoles, Ana Siucho se habría acogido al silencio al dar su declaración. La esposa de ‘Orejas’ había contado, en una entrevista con Beto Ortiz, que su hermano Roberto le entregó un auto a ‘Chibolín’ como parte de pago por haberlo ayudado a cambiar de nacionalidad, de peruano a chino. Este vehículo estaba a nombre de Edison Flores.
“[Los pedidos] eran constantes. Roberto le dice: ‘mira, tío, no tengo la cantidad que me están pidiendo, pero ahorita tengo a la mano el carro. No lo uso, pero véndelo y tienes el dinero. Esa fue la razón de que el carro pasa al nombre de Andrés Hurtado, no fue una delicadeza”, manifestó.
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