El terrible feminicidio de Rosa Peralta Torres de 41 años responde nuevamente a un ataque de celos. Esta vez, como miles de otros casos de mujeres asesinadas, el ataque fue ejecutado por su expareja, un desequilibrado sujeto que no toleró que la mujer decidiera terminar la relación y la mató en el Callao, frente al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
Según Flor Fernández, hija de la víctima, Víctor Soto Mija de 52 años, el asesino confeso, se presentó hace unos meses frente a su madre como un hombre cariñoso. Era un asiduo cliente al puesto de venta de salchipapas de Rosa Peralta en Ventanilla.
“Cuando mi mamá vendía, él iba como cliente a comprarle. Así comenzó a enamorarla, a invitarla a salir pero mi mamá no aceptaba”, contó la joven aún muy consternada por la violenta muerte de su madre.
La muchacha contó que tras dos meses de insistencia, Rosa Peralta aceptó la propuesta de su asesino y empezaron a salir juntos. Luego de varias citas, la mujer decidió comenzar una relación con Víctor Soto Mija.
La pareja estuvo unida durante 7 meses, hasta que Rosa Peralta se enteró que el sujeto tenía otra pareja, que actualmente se encuentra embarazada. Decepcionada, le puso fin a la relación sin jamás esperar la reacción de Víctor Soto Mija.
Durante algunos días, el sujeto la siguió por todos lados, incluso a su trabajo, y la llenó de mensajes pidiéndole volver. Finalmente, la abordó frente al Aeropuerto Jorge Chávez, donde le cortó el cuello sin piedad.
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