A pocos días de la Navidad, la región de Ayacucho se ha visto sacudida por un trágico incidente que ha dejado a una familia en desesperación. Un niño de 11 años sufrió la pérdida de nueve dedos de sus manos y graves lesiones en su ojo izquierdo tras la explosión de un artefacto pirotécnico que manipulaba sin precaución.
El fatídico accidente ocurrió cuando el menor encontró el pirotécnico fuera de su casa y, sin medir las consecuencias, decidió encenderlo. El estallido resonó en el vecindario, provocando gritos de dolor que alertaron a su madre y a los vecinos.
De inmediato, lo trasladaron al Hospital Jesús Nazareno, pero debido a la falta de un especialista, fue referido al Hospital Regional de Ayacucho, donde fue intervenido quirúrgicamente.
Durante la operación, los médicos confirmaron la mutilación de nueve dedos del menor y la pérdida de su ojo izquierdo, que quedó ensangrentado y sin el vítreo, un líquido esencial para la visión.
Aunque el niño se encuentra estable en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos, su estado requiere atención especializada en Lima para tratar sus lesiones oculares.
Padres piden que su hijo sea trasladado a Lima
Los padres del menor han hecho un llamado a la solidaridad para poder trasladarlo a Lima y garantizar la atención médica necesaria para su recuperación. Este lamentable suceso pone en evidencia los peligros de la manipulación de pirotécnicos y la importancia de prevenir su uso, especialmente entre los niños.
Las autoridades locales y organizaciones solidarias están convocando a la ciudadanía para apoyar a la familia en estos momentos difíciles, recordándonos la necesidad de reforzar las medidas de prevención durante las festividades.