No tenían autorización del Ministerio de Salud para realizar pruebas de COVID-19 y los que atendían ni siquiera contaban con estudios relacionados a la rama de medicina. Falsos médicos, enfermeras, obstetras y laboratoristas, que se aprovechaban de la desesperación de decenas que buscaban descartar el coronavirus por presentar algunos síntomas, fueron intervenidos en un centro médico por agentes de la Dirección de Seguridad del Estado en Ate.
Los custodios llegaron hasta el pseudo Consultorio Obstétrico Santo Domingo, ubicado en la cuadra 55 de la avenida Nicolás Ayllón, por acciones de inteligencia.
Ante la presencia de los custodios el pseudo personal médico cerró las puertas de los consultorios para evitar la intervención y después de varios minutos, al sentirse descubiertos y no tener escapatoria, les abrieron.
En el lugar los policías encontraron a ocho personas que esperaban el resultado de la prueba de COVID-19, otros esperaban su turno para la atención y también para la toma de ecografías para descarte de embarazo, y exámenes de sangre.
Los custodios constataron que el local no cumplía con los protocolos de bioseguridad en el contexto de la pandemia.
En total intervinieron a seis personas, entre ellas Marile Arotoma, dueña del centro médico. Todos están incursos en el presunto delito contra la salud pública, comercio clandestino de productos-ejercicio ilegal de la medicina y otros.
Personal de la Municipalidad de Ate llegó al lugar y clausuró el local ya que no tenían licencia de funcionamiento.