Doña Lila Fernández (62) se salvó de milagro pues, con una rama seca manipuló, sin saber, un artefacto artesanal que explosionó frente a su casa, en Ate. Ella salió ilesa.
A las 11:30 de la mañana, la señora salió a hacer a un lado la basura que habían tirado sus vecinos, en la calle Sirio, urbanización Sol de Vitarte.
“Con una ramita seca empujé el bulto y reventó. Me llené de fuego y humo, pero estoy bien. Ha sido un milagro para mí”, dijo.
La detonación provocó terror entre los vecinos. Policías de la UDEX acudieron al lugar, ya que en la pista había otro objeto similar.
La calle fue cerrada por una hora hasta que fue retirado.
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