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El pasado miércoles 5 de abril, cuando el país se preparaba para recibir la Semana Santa, Gian Marco Caro Núñez, de 30 años, fue asesinado, solo por negarse a que le limpiaran el parabrisas, por el limpiador de lunas José Alberto Jirón Holder, un venezolano de 22 años indocumentado que trabaja en el Centro de Lima y que no mostró remordimiento alguno por su crimen. Este pertenecería a una mafia que opera con total impunidad en los semáforos de Lima.
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Según un informe de ‘Latina’, el delincuente extranjero pertenecería a una mafia denominada ‘Los Coros’ o ‘Los Coreanos’.
El grupo delictivo, según un testimonio, opera en las intersecciones de las principales calles y avenidas de toda la ciudad de Lima. Cuando los semáforos cambian de color y los autos deben detenerse, los conductores quedan a merced de los hampones, quienes exigen pagos y en otras ocasiones asaltan a sus víctimas.
El nombre se debe a que esta banda, que opera también países como Chile, Colombia y Ecuador, es originaria de la ciudad Santa Ana de Coro, en el estado de Falcón, en Venezuela. “Ahí apodan a los que trabajan en el semáforo ‘Los Coreanos’, supuestamente”, indicó el testigo.
El hombre, que prefirió no ser identificado, señaló que los extranjeros que quieran “trabajar” en ciertas zonas deben pedir permiso a los responsables o líderes de esta mafia antes de instalarse. “Muchos venezolanos han ido para allá y los han corrido de allá. Es una mafia de allí”, dijo.
Según las primeras averiguaciones, los delincuentes operan en grupo en ciertos puntos concurridos de las intersecciones de avenidas o calles de la ciudad. Una vez que han ejecutado un asalto o ataque se “mudan” hacia otra zona, con total impunidad.
SIN ARREPENTIMIENTOS
Según narró la Policía y el propio asesino, el extranjero quiso limpiar el auto de la víctima pero este se negó y le profirió varios insultos. En ese momento, Jirón Holder le arrojó agua en la cara y el occiso se bajó de su vehículo y lo golpeó en el rostro.
“Yo le iba limpiar el carro y el pana se molestó y comenzó a decirme conch... le eché agua en la cara y en el carro y él se bajó y comenzó a agredirme, a lanzarme golpes en la cara. Me dio varios golpes en la cara y yo le di con una piquetera (tijera) en el pecho. No pensé nada, simplemente me estaba defendiendo”, contó ante las autoridades.
El efectivo policial que lo estaba interrogando le preguntó si volvería a cometer un crimen similar y él contestó: “No sé, porque yo no le hice nada para que él se bajara así”. “No sabía que se iba morir”, agregó al ser consultado por su arrepentimiento.
ASESINO DE LAS TIJERAS ERA ILEGAL EN PERÚ
La Policía también informó que al momento de la captura de José Alberto Jirón Holder no le encontraron documentos ni identificación alguna, por lo que se encuentran coordinando con la Interpol y la Policía de Extranjería. “La Policía de Extranjería dice que no tiene movimiento migratorio. El señor ingresó por Huaquilla”, comentó el efectivo.
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