Al mes de nacido, a Adriel Bazán Trigoso le diagnosticaron cáncer de hueso. Este mal provocó que a su tan corta edad le amputaran el brazo izquierdo a la altura del codo. Hoy, a los 20 años, este jovencito de Villa El Salvador no vive lamentándose por aquello que le falta, más bien busca la manera de progresar en la vida. Por eso, para ahorrar dinero y estudiar idiomas más adelante, diariamente ofrece un show de malabarismo en los semáforos. Conozcamos su historia de lucha y motivación.
Cuéntame, ¿cómo perdiste el brazo?
Fui diagnosticado con cáncer de hueso. Tenía un mes de nacido cuando los médicos detectaron que tenía un tumor en la mano izquierda. La única solución fue amputar el brazo izquierdo a la altura del codo.
Imagino que esa noticia fue un golpe muy duro para tus padres...
Sí, en especial para mi mamá, ella ha sido mi fortaleza en todo momento. Mi padre desapareció cuando sufrí la amputación del brazo.
Pese a todo, seguiste adelante. ¿Cómo te inicias en el malabarismo?
En el 2015, empecé a hacer malabares en las calles. Yo trabajaba limpiando lunas y compartía el espacio con unos malabaristas. Ellos me enseñaron algunos trucos y me obsequiaron unas pelotas.
¿Fue complicado hacer esos trucos?
Sí, las pelotas se me caían. No me desanimé y empecé a ensayar con limones, naranjas y hasta con piedras (risas).
¿Cuánto tiempo ensayabas?
Más de 8 horas diarias.
¿Tienes un horario de trabajo?
Claro, trabajo desde las 6 de la mañana hasta las 6 de la tarde.
¿Has tenido problemas por trabajar en la calle?
He tenido problemas con el serenazgo, incluso a veces me han quitado las pelotas.
¿Se ha complicado tu salud al realizar esta actividad?
Más o menos. Tengo dolor en el riñón y los hombros cuando realizo trucos con cuatro pelotas porque mi peso se inclina hacia la derecha. Pero tengo que trabajar.
¿Con el dinero que ganas ayudas a tu mamá?
Al inicio trabajaba para ayudar a mi mamá a pagar el agua y la luz. Luego ella me dijo que mejor ahorre para mi futuro.
¿Qué dice tu familia de todo esto?
Mi mamá me apoya y mis dos hermanos, que felizmente están sanitos, también me empujan a salir adelante.
Aparte de ser malabarista, ¿estudias algo?
Estudiaba inglés en el Británico. Lo dejé porque no podía pagar la mensualidad, además no tengo un buen celular y tampoco cuento con una laptop para las clases virtuales.
¿Qué mensaje darías a aquellos que viven quejándose?
Que vean el lado bueno de la vida, que nunca se rindan. Hay cosas difíciles en la vida, pero mientras uno mantenga la emoción y las ganas, los problemas desaparecerán.
¿Cuál es tu sueño?
Terminar mi carrera de inglés y abrir un restaurante.
Si alguien desea ayudarte con alguna beca de inglés, ¿dónde te ubican?
Pueden llamarme al 921-600-397.