“El proceso creativo de Isla Decepción fue diferente a Qué vergüenza”, dice desde Barcelona donde reside actualmente. La escritora chilena, destacada por la revista británica Granta como una de las 25 mejores narradoras jóvenes en español, acaba de publicar su primera novela, una ficción acerca de Corea del Sur, un país que admira y ha visitado; y las malas condiciones de trabajo en la industria pesquera, para lo cual investigó, entrevistó y leyó mucho sobre el tema.

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En Isla Decepción (Seix Barral, 2021), tres personajes se convergen: Lee, un pescador coreano que era esclavizado en un barco pesquero y logra a escapar gracias a Miguel, quien lo esconde en su casa, en Punta Arenas. Allí se encuentra Marcela, hija de Miguel, una joven con el corazón roto y sin trabajo.

Los personajes son muy distintos entre ellos, ¿armaste un boceto de cómo sería cada uno ?

La novela se escribió en cuatro años, así que tuve tiempo de reescribirlos. Quería transmitirlo de la mejor manera posible. No diría que fue complicado sino que hay que trabajar mucho. Todo hay que preguntarlo, investigarlo o ser muy observador: cómo la gente hace cosas como caminar o respirar.

En Isla Decepción se nota que hay muchas cosas que no han cambiado en altamar como el esclavismo que sufren muchos pescadores o el tráfico de personas.

Así es. Aunque Lee es un personaje que lo siento más metafórico. Es una representación de un marinero estándar. Tuve que investigar mucho sobre la industria pesquera y las condiciones laborales que son crueles y esclavistas. Entrevisté a marineros de todo tipo para que me contaran sus anécdotas, leí testimonios y memoria de marineros que habían estado en altamar.

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Estuviste en Corea del Sur, ¿te ayudó para escribir Isla Decepción?

No, estuve en Corea del Sur porque quería conocerlo, es uno de mis países favoritos. Es tan lejano y sentía que necesitaba verlo. No es que haya hecho una investigación sobre ese país, solo fui a observar. El idioma me parece muy complicado.

En Isla Decepción los tres personajes no se entienden por el idioma, pero hay un entendimiento tácito de que cada uno guarda un secreto muy oscuro.

Creo que la comunicación transita no por el lenguaje o las palabras sino en cómo intuir que los tres guardan un secreto.

'Isla Decepción' es la primera novela de la escritora chilena Paulina Flores. (Foto: Seix Barral)
'Isla Decepción' es la primera novela de la escritora chilena Paulina Flores. (Foto: Seix Barral)

CHILE EN EL CORAZÓN

Eres activista, así que no puedo dejar de preguntarte qué opinas de Elisa Loncón como la presidenta de la .

Fue demasiada felicidad, optimismo y orgullo, que sea una mujer mapuche lingüista quien lleve esta bandera. Es mi sueño.

Además, estuvieron luchando muchos años.

Sí, yo participé en la Revolución pingüina (la movilización estudiantil en Chile de 2006). Cuando cumplí 30 años pensé que nunca iba a cambiar, pero cuando fue el último estallido social me di cuenta que se sentía distinto, que esta vez podía ser muy diferente.

Hay varios aspectos que hay que cambiar en la política latinoamericana.

Se están buscando alternativas, pero hay un sistema terrible y demasiado nivel de desigualdad. En la clase política hay varios aspectos que hay que cambiar, una conversación general para hablar sobre el impuesto a los millonarios, el sistema de represión de los policías, entre otras cosas. Yo estoy esperanzada e ilusionada que muchas cosas van a cambiar. Recuerdo que cuando tenía 15 años mis papás me decían que cuando cumpla 28 años iba a dejar de protestar porque debía trabajar. Ahora pago cuentas como la luz, la internet, el celular, pero sigo protestando. No tiene que ver con que seas grande o chico sino con no conformarse, eso me da mucha ilusión, pero sé que ese cambio no será rápido.

Poco a poco...

Pero más rápido que lo que íbamos antes.

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