Con mucha alegría y tranquilidad, don Enrique Orlando Giurfa Barbieri, de 100 años, recibió la primera dosis de protección contra el COVID-19 en el vacunatorio Aljovín de EsSalud, en el Cercado de Lima.
Don Enrique decidió ingresar al vacunatorio caminando acompañado de su nieto y se negó a usar una silla de ruedas para ser inmunizado como otros adultos mayores.
En el triaje contó que nació en Matucana en 1920, es padre de cuatro hijos y tiene 14 nietos y el próximo 10 de junio cumpliría 101 años. Asimismo, dijo que solo padece de presión emotiva y que su vitalidad obedece a que lleva una vida sana.
Ahora que recibió la primera dosis de la vacunación, ve con esperanza poder volver a abrazar a sus amigos y familiares, a quienes no ve desde hace un año en que se inició la pandemia por el COVID-19.
Luego de pasar por admisión y firmar el consentimiento informado, recibió su primera dosis. Por lo pronto, y hasta que reciba la segunda dosis, don Enrique volverá a la lectura que lo apasiona y a sus cortas caminatas en el parque.
Don Enrique se retiró feliz y quiso hacerlo como llegó, caminando del brazo de su nieto, demostrando que la fortaleza de su alma también se refleja en su cuerpo.
En tanto, el doctor Héctor Berastain se mostró complacido al recibir a don Enrique en uno de los 15 módulos del vacunatorio Aljovín de EsSalud, que atiende a 500 ancianitos a diario desde las 7 de la mañana hasta las 6 de la tarde.