Aunque las manifestaciones en Lima transcurrieron inicialmente en un clima de paz, la jornada se tornó violenta entrada a noche luego de que los marchantes fueron dispersados con bombas lacrimógenas de las inmediaciones del Congreso de la República. Fue entonces que la mayoría de los manifestantes retornó a la Plaza San Martín y otras calles del Cercado.
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La violencia también involucró a los periodistas que cubrían la denominada tercera toma de Lima y por lo menos siete de ellos fueron víctimas de todo tipo de ataques, desde físicos hasta verbales, según un reporte del Observatorio de Libertad de Prensa de la Asociación Nacional de Periodistas del Perú (ANP), que confirmó denuncias efectuadas en redes sociales.
El primer ataque registrado fue el que sufrió el equipo periodístico de Panamericana TV, conformado por la reportera Tifanny Tipiani y el camarógrafo Gustavo Castro, quien entrevistaba a reservistas en la Plaza San Martín cuando un grupo de personas se acercó a insultarles y hostigarles, mientras se retiraban la reportera recibió una patada.
Alrededor de las 6:30 de la tarde, el fotoperiodista Antonio Melgarejo, del Diario La República, fue abordado por personas desconocidas a la altura de la antigua sede de la Biblioteca Nacional que le robaron un lente de su cámara, reportó ANP.
Periodistas hospitalizados
A la altura de la sede del Ministerio Público en la Av. Abancay, la fotoperiodista Gabriela Ramos Carbajal recibió el disparo de una deflagración de perdigones en el cuerpo, ocasionándole alrededor de 5 heridas en espalda, brazos y rostro. La joven periodista fue trasladada al hospital Dos de Mayo.
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Otro fotoperiodista, Rober Llicla, integrante del colectivo Fotógrafos AutoConvocados, fue impactado por una piedra en la cabeza cuando registraba incidencias alrededor del Parque Universitario. También fue trasladado al hospital Arzobispo Loayza.
Mientras que a de las 8:15 de la noche Karina Reynafarge y Leonardo Dávila, de ATV, denunciaron insultos, hostigamientos y el robo del dron, con posterior destrucción del mismo, mientras registraban protestas en el centro de Lima.
La ANP expresó su “enérgica protesta frente a cada uno de los hechos denunciados y exige al Ministerio Público desarrollar una investigación diligente para identificar y sancionar a los responsables de los delitos de hurto y lesiones”. Seis ataques fueron perpetrados por civiles y 1 por agentes policiales, indicó la agremiación.
En ese sentido, la ANP recordó a la Policía Nacional “que tiene el deber de salvaguardar la integridad de todas las personas que participan de las protestas, incluyendo periodistas que cumplen un trabajo de registro de la misma”.
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