
HORROR EN PUNO. Un colectivero que había sido detenido, como el principal sospechoso de asesinar y descuartizar a su pareja, se quitó la vida colgándose en el calabozo de la sede de la División de Investigación Criminal (Divincri) en Puno.
Ronaldo Mamani Lorenzo (26), quien se dedicaba a realizar el servicio de colectivo en la ruta Puno-Juliaca había sido detenido como el principal sospechoso de la desaparición de Lizbeth Chañi Marca (25).
Debido a las contradicciones en las que cayó, la policía lo detuvo; sin embargo nadie imaginó que un día después lo iban a encontrar colgado en el calabozo.
Horas después de su muerte, las autoridades encontraron restos, que serían de Chañi Marca dentro de un costal, en las aguas del río Cutimbo, a unos 15 kilómetros de la ciudad de Puno, en la carretera que conduce a Moquegua.

HALLAN MÁS RESTOS DE LA VÍCTIMA EN PUNO
Más restos de Lisbeth Erica Chañi fueron hallados en el puente Aguas Termales, en la vía rumbo a Moquegua.
La policía de Puno realizó el hallazgo gracias al registro de rutas de GPS de la combi de transporte interprovincial, de placa X9E-958, que manejaba Ronaldo.

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