RONDA LA TRAGEDIA. Solo un día después de que choque en cadena dejara tres muertos y catorce heridos en la variante Pasamayo, producto de la neblina, un bus interprovincial se incendió por completo en medio de dicha carretera, considerada la más peligrosa del país, sembrando pánico entre los más de 60 pasajeros que viajaban al norte del país y provocando otra colisión múltiple.
El vehículo había partido alrededor de las 9 p. m. desde su terminal en Lima, con destino a las ciudades de Chimbote y Trujillo, y al llegar al kilómetro 67 de Pasamayo, en Huaral, aparentemente sufrió desperfectos técnicos que obligaron al conductor a intentar estacionarse al costado de la ruta.
Testigos relatan que el ambiente parecía normal hasta que los pasajeros del segundo nivel del ómnibus comenzaron a percibir un olor a quemado y notaron humo emanando de uno de los compartimentos.
Alarmados por el fuego, los pasajeros evacuaron rápidamente el vehículo, llevándose solo sus pertenencias de mano. En medio de la confusión, un automóvil blanco que se dirigía a Huaral impactó contra el ómnibus.
Los pasajeros abandonaron el bus como pudieron mientras las llamas comenzaban a consumir el vehículo. En medio del caos, un segundo vehículo que también se dirigía a Huaral impactó contra una camioneta en el lugar del incendio.
“Sentimos un ligero golpe. Yo estaba viendo una película cuando se sintió el impacto. No pensamos que era algo serio, hasta que los pasajeros del segundo piso comenzaron a gritar que había humo. El chofer trató de orillarse, pero los frenos no respondían. Finalmente, cuando se detuvo, pudimos bajar, pero el bus ya se estaba incendiando”, comentó uno de los pasajeros a Andina.
Los pasajeros lograron alejar dicha camioneta para evitar que se incendiara, pero una tercera unidad del tipo combi también sufrió un choque.
LLOVIZNA Y DENSA NIEBLA
Tal como sucedió en el trágico accidente de la madrugada del lunes, las condiciones climáticas desfavorables, como llovizna y densa niebla, contribuyeron a los violentos choques en cadena. Como resultado, la mayoría de los viajeros perdió todo su equipaje.
Los bomberos de Chancay, Ancón, Puente Piedra y Carabayllo acudieron rápidamente al lugar para sofocar el incendio. Serenos de Aucallama y los bomberos trasladaron a los heridos, incluidos menores y adultos, a los hospitales más cercanos para recibir atención médica.
Tras cerca de tres horas de ardua labor, la emergencia vial fue controlada y los afectados fueron llevados a lugares seguros en otros buses.
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