Cerdos sacrificados, tirados en el piso junto a residuos de basura, gran cantidad de sangre, moscas y vísceras expuestas, fue lo que halló en un camal clandestino el personal de fiscalización de la municipalidad distrital de Chilca, en la provincia de Huancayo, en Junín.
La mañana de ayer, el personal de fiscalización de esta comuna llegó a dicho negocio ubicado en la avenida Próceres y descubrió que funcionaba en pésimas condiciones.
Además, los trabajadores no portaban guantes quirúrgicos, ni cobertor de cabello, establecidos por los protocolos de bioseguridad. Los implementos del lugar, como mesas, cuchillos, machetes, ganchos y otros se encontraban oxidados.
Al ser intervenidos los propietarios del camal intentaron justificar su actitud señalando, que decidieron reiniciar esta actividad porque no tienen otro trabajo.
Los fiscalizadores informaron, que este negocio funcionaba irregularmente desde hace varios meses en esta comuna.
Los vecinos del lugar se quejaron ante la autoridad y exigieron más control, pues según ellos el camal funcionaba irregularmente desde hace varios meses.