La Contraloría General advirtió la falta de procedimientos para el control de las vacunas en el Hospital Regional Daniel Alcides Carrión, por lo que se desconoce la ubicación de dos de las 971 dosis entregadas por la Dirección Regional de Salud (Diresa) Junín.
Según el informe N° 5426-2021-CG/GRJU-SCC, el primer lote de vacunas contra el COVID-19 le fue entregado al citado nosocomio el último 9 febrero, sin embargo, una semana después informaron a la Diresa Junín, mediante un oficio, que las vacunas llegaron incompletas, por lo que solicitó la reposición de las dos dosis faltantes.
Dicha desaparición fue advertida el mismo día de la recepción de las vacunas, sin embargo, el acta de levantamiento de observaciones en el que se indica que llegaron 969 dosis y no 971, como figura en la guía de remisión, fue elaborada al día siguiente.
La comisión de control advirtió que la mencionada acta no contenía los datos de las cajas que presuntamente llegaron con vacunas incompletas, tampoco fotografías ni documentación que sustente dicha versión. Además, no consigna la firma de la coordinadora de la Estrategia Nacional del Área de Inmunizaciones del hospital.
También se evidenció que en los puntos de vacunación no se cumplió con acondicionar recipientes con tapas para la disposición de los residuos sólidos comunes, biocontaminantes o especiales, como establece la Norma Técnica de Salud; situación que pone en riesgo la salud del personal asistencial que realiza el proceso de inmunización y de los usuarios del establecimiento médico.
Adicionalmente, se advirtió que la cadena de frío del hospital cuenta con solo una data logger, es decir, un dispositivo que registra la temperatura de las vacunas, a pesar de tener varias unidades de conservación, lo que no permitiría un adecuado monitoreo de la temperatura de las dosis de inmunización que lleguen en lo sucesivo.