El Poder Judicial de Apurímac dictó nueve meses de prisión preventiva contra un chofer de combi de servicio público por presuntamente abusar sexualmente de una menor de 11 años, que trabajaba como cobradora en este vehículo.
Se trata de Delfín Quispe Centeno (23), quien es investigado por el delito de violación de la libertad sexual en contra de una menor de edad.
De acuerdo con la Fiscalía, el ataque ocurrió el pasado 25 de febrero, cuando la menor se dirigía a su casa en la ciudad de Talavera, en la provincia de Andahuaylas, en compañía de su supuesto agresor, tras terminar su trabajo. Sin embargo, este la llevó a un descampado, donde la habría ultrajado, e incluso luego dejó a la niña cerca de su vivienda.
La madre de la menor fue quien denunció el ilícito en la Policía. Ella se dio cuenta que su hija había sido violentada luego de revisar su celular. En este halló un mensaje en el que el chofer le pedía a la agraviada que se cambie de chompa, la cual tenía manchas de sangre y posibles fluidos.
La fiscal Yaneth Alfaro Chirinos solicitará la pena de cadena perpetua para Quispe Centeno si se comprueba la responsabilidad del delito. Este fue capturado en su casa, al día siguiente de presuntamente perpetrar el ilícito.