Con el único objetivo de combatir esta pandemia, médicos del Hospital Rezola de San Vicente de Cañete, solicitaron ayuda urgente a las autoridades tras rebasar su capacidad de atención en el nosocomio que ha improvisado en los pasillos, para atender a pacientes COVID-19.
Según el director del hospital, Médico Jorge Seminario, la falta de camas, ventiladores y oxígeno son las principales necesidades. En ese sentido, sus colegas decidieron pedir ayuda al Gobierno ante el alarmante incremento de casos que superan las mil personas.
“Hace varias semanas tenemos la carencia de oxígeno... Se ha hecho coordinaciones con el gobierno regional para poner una planta de oxígeno pero eso demorará... Hacemos coordinaciones por todo sitio para conseguir este elemento vital y equipos de protección personal”, dijo Seminario.
CARPA EN LA CALLE
Se supo que a diario, los pacientes utilizan 120 balones y las empresas abastecedoras de este elemento no alcanzan a cubrir la demanda. Además, los enfermos por otros males vendrían siendo atendidos en un carpa instalada en la calle.