Con total sangre fría, el mototaxista Isidro Sánchez Paz confesó haber acabado con la vida de su excuñada Santos Corina Chamay Cabanillas (33) y de su pequeña hija de 8 años, a quienes estranguló y abandonó en una chacra, en la provincia de Chepén, en la región La Libertad.
A pesar de haber negado su participación en el crimen en varias ocasiones, Sánchez Paz narró con frialdad la forma en que les quitó la vida. Confesó ante las autoridades que su la víctima lo amenazó con contarle a su esposa que mantenían una relación sentimental.
Según su versión, mantuvo una relación sentimental con la joven madre durante unos meses, pero luego decidieron ponerle punto final al clandestino romance; sin embargo, afirma, continuaron viéndose como amigos.
Durante la reconstrucción del crimen narró a la Policía sin el menor remordimiento que primero asesinó a su excuñada y luego a la niña.
“Allí la agarré con mi antebrazo así y también vi que se desvaneció unos dos minutos así y a la niña la agarré como estaba desvanecida la llevé así. De allí lleve a la niña por allá y regresé y la lleve a la señora a la chacra de la calle”, relató durante la reconstrucción del doble crimen.
También añadió que la víctima lo amenazó con descubrirlo delante de su esposa. “Como mi señora no sabía me dijo le voy a decir a tu mujer que estás conmigo voy a hacer que te separes de tu mujer, así discutimos y me llevó de cólera”.
Isidro Sánchez Paz fue captado por una cámara de seguridad, el domingo 10 de setiembre, junto a Santos Corina Chamay Cabanillas (33) y de su pequeña hija.
En la grabación se aprecia que alrededor de las 3:09 de la tarde, la víctima conversa con el conductor del vehículo; mientras su hija le ayuda a repartir unos volantes a inmediaciones del mercado de Pacanguilla. Pero, luego de seis minutos; es decir, a las 3:16 de la tarde, abordaron el vehículo. En adelante, no se supo más de las víctimas hasta el hallazgo de sus cuerpos el pasado 17 de setiembre.
Aunque el acusado afirmó que actuó solo, el abogado de los deudos, Juan Alvarado, sospecha la posible participación de terceras personas en el crimen. “Es imposible que una sola persona haya actuado sola en este doble crimen”, señaló el letrado.
Isidro Sánchez Paz, quien estuvo prófugo durante varias semanas, enfrentará cargos por feminicidio y homicidio calificado.
De ser encontrado culpable, podría enfrentar una condena de 35 años de cárcel. La confesión de este doble crimen ha conmocionado a la comunidad de Chepén, que exige justicia para las víctimas y sus familias.
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