El taxista Abdul I.H es buscado por la policía, acusado de intentar violar a una niña de 11 años, en una casa abandona, en el A.H. ‘Los Andes’, en el distrito de Cayma, en Arequipa. El ataque a la menor se frustró por la intervención de sus familiares y vecinos.
A las 6 de la tarde del jueves, V.Q.P. observó desde la ventana del segundo piso de su casa que el taxista estacionó el auto Tico V2E-691 frente a la bodega de su hermana, ubicada en la Mz. B, lote 20, donde su sobrina de 11 años estaba a cargo de la atención de los clientes. Abdul Izquierdo ingresó al local y pidió a la menor usar los servicios higiénicos.
Según la denuncia de la mujer, al ver que su sobrina estaba sola en la tienda, el taxista fingió que conocía a alguien en su barrio y le pidió ayuda para entregar un mensaje. Confiada, la niña salió del local con Izquierdo Huarza, que la llevó a una vivienda abandonada, en el distrito de Cayma, en Arequipa.
Afortunadamente, la tía de la niña los vio caminar por la calle y decidió ir tras de ellos. “Al dar la vuelta a la manzana no los vi y comencé a gritar. Llamaba a mi sobrina y como nadie respondía regresé a la tienda a pedir ayuda”, dijo la mujer. Abdul Izquierdo al verse descubierto abandonó a la niña y fue en busca de su auto encontrándose con la tía de la menor. Mientras sus vecinos salían de sus casas para ayudar a la mujer, ella volvió a buscar a su sobrina.
Al escuchar los gritos de la niña en el interior de un predio abandonado en el distrito de Cayma, en Arequipa, ingresó y la halló boca abajo, con tres bloques de cemento en la espalda y con el pantalón hasta las rodillas. Mientras la rescataba, el taxista huyó, dejando el auto abandonado.
Los agentes de secuestros del Depincri de Arequipa ubicaron a los dueños del Tico, quienes confirmaron que Abdul Izquierdo alquilaba el carro desde hace cuatro meses, además, fueron a buscarlo a sus dos inmuebles en Alto Selva Alegre y en el centro, pero no lo encontraron.