Muchos son los factores que pueden impactar en el rendimiento académico de un estudiante universitario, debido a que esta nueva etapa implica asumir distintas responsabilidades buscando un equilibrio entre los estudios y la vida personal. En algunas ocasiones, por ejemplo, la carga académica, laboral y familiar, puede complicar el rendimiento, por lo cual es fundamental que el alumno o alumna tenga las herramientas para afrontar situaciones de estrés, ansiedad y desarrollar resiliencia universitaria.
“La universidad es responsable de promover espacios de desarrollo académico y personal que, independientemente de la carga académica, permitan a nuestros alumnos llevar sus capacidades al máximo. El acompañamiento y el rigor académico caminan juntos y hoy en día es importante entender que el perfil del estudiante es distinto. Nuestro rol como academia es buscar que nuestros estudiantes transciendan guiándolos en no sólo llegar a la meta sino en disfrutar el camino, en el cual la nota o el promedio no sean el único reflejo de su rendimiento”, afirma la Dra. Esther Barrantes, vicerrectora académica de la Universidad Norbert Wiener, potenciada por Arizona State University.
Teniendo en cuenta ello y en torno al Día del Docente Universitario, la especialista brinda cinco claves para mejorar el rendimiento académico en los universitarios:
- Organiza tu tiempo. Para lograr los resultados académicos que esperas, la organización es fundamental durante cada ciclo. Establece horarios para estudiar, repasar, así como para distraerte o descansar. No olvides planificar tus actividades por prioridad.
- Organiza bien tus cursos. Escoger la mejor combinación posible de cursos al momento de matricularse es lo más estratégico para evitar la sobrecarga que puede desencadenar en estrés, ansiedad y diversos problemas de salud mental.
- Fija tus objetivos y ve tras ellos. Los grandes resultados son el producto de un proceso. Colócate metas a corto plazo y alcanzables, cuando la logres sentirás satisfacción y ello te motivará a cumplir una nueva meta. El factor clave es la disciplina, por lo que debes ser constante en tus estudios.
- Rodéate de un buen equipo. Con el que puedas compartir disciplina y disfrutar el proceso del aprendizaje. El tipo de amistad también influye en tu desarrollo, pues te contagiarás de sus vibras, compartirán experiencias y hasta puede ser una red de apoyo laboral de cara al futuro.
- Cuida tu salud física y mental. Para que tu cerebro funcione correctamente es importante que duermas de siete a ocho horas, asimismo, es ideal que realices pausas activas durante el día que te permitan estirar tus músculos para evitar tensiones. Por último, es vital que mantengas una buena alimentación e hidratación para mantenerte sano y activo durante tus horas académicas.
“Un estudiante motivado, que cuenta con una excelente experiencia desde el inicio de clases, con una buena matrícula, asesoría de docente y seguimiento, podrá establecer horarios que le permitan organizarse adecuadamente durante el semestre. Asimismo, debemos buscar fortalecer la confianza de nuestros estudiantes para que se sientan comprometidos y orgullosos de lo que hacen”, agrega la especialista de la Universidad Norbert Wiener, potenciada por Arizona State University.