
Pasear con un perro que tira de la correa puede ser agotador y frustrante. Este comportamiento suele deberse a la emoción, la falta de entrenamiento o el deseo de explorar del animalito. Sin embargo, con paciencia y constancia es posible corregirlo y hacer que los paseos sean más placenteros para ambos.
“No uses una cadena de estrangulamiento (también conocida como ‘collar de control’) o un collar púas. El entrenamiento siempre debe ser una experiencia positiva basada en recompensas que fomenten la unión entre el can y su dueño. No lo castigues de manera que puedas inspirar miedo; esto, obviamente, es contraproducente”, aconsejan los expertos de Purina.

Consejos
♦USA LA CORREA CORRECTA. Una correa, entre 1.5 y 2 metros, permite el control sin restringir demasiado el movimiento del perro. Evita las extensibles, ya que fomentan los tirones.
♦DETENTE CUANDO JALE. Si el perro tira, deja de caminar. Reanuda el paso solo cuando la correa esté suelta. Así aprenderá que avanzar depende de caminar tranquilo.
♦REFUERZA EL BUEN COMPORTAMIENTO. Premia con caricias, palabras de ánimo o galletitas cuando camine a tu lado sin jalar.
♦CAMBIA DE DIRECCIÓN. Si tira, gira en sentido contrario. Esto lo obligará a prestar atención y a seguirte en lugar de liderar el paseo.
♦PRACTICA EN CASA. Antes de salir, enséñale a caminar a tu lado en un espacio sin distracciones. Esto refuerza el hábito y facilita la adaptación en la calle.
Datito
Enseñar a tu perro comandos básicos como ‘sentado’, ‘quieto’ o ‘aquí’ puede ser de gran ayuda para evitar que jale de la correa.
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