El General Orlando Velasco Mujica, Comandante General de la PNP, informó que un menor de 15 años se encuentra entre los 23 personas que participaron en la denominada ‘fiesta de la muerte’ en la discoteca ‘Thomas Restobar’ de Los Olivos, donde 13 personas murieron asfixiadas. Los intervenidos fueron trasladados a la Dirección de Investigación Criminal, donde se sometieron a pruebas rápidas de las cuales 15 resultaron positivos a COVID-19. Incluso el menor de edad es uno de los portadores del virus.
Velasco Mujica detalló que, de los 23 detenidos, hay un menor de edad y otras personas de 30 a 40 años. Reiteró que los agentes policiales no hicieron uno de armas ni de bombas lacrimógenas para dispersar a los asistentes de este centro.
“Sí, de los 23 detenidos, hay un menos de edad entre ellos. Lo que sí quisiera resaltar es que hay personas mayores de edad, no solo de 18, 20 o 21, personas detenidas o que bordean personas de 30, 35 hasta 40 años. Ahí se ve la irresponsabilidad de estos empresarios en realizar estas fiestas”, declaró en diálogo con RPP.
Asimismo, sostuvo que los dos agentes policiales que entraron a la discoteca junto con el capitán de la PNP Amésquita, también quedaron atrapados durante la operación. Sin embargo, están fuera de peligro.
“Tras la intervención, el capitán y los dos efectivos que entran, empezaron a retroceder y ellos quedan atrapados en la puerta cerrada y son los que reciben el mayor impacto. Afortunadamente los tres ya están fuera de peligro e incluso tras dos horas de estar en la clínica, se reincorporó a la operación”, detalló Velasco Mujica.
Trece personas fallecieron la noche del sábado durante una intervención policial al interior de una discoteca en el distrito de Los Olivos. Los hechos ocurrieron minutos antes de iniciarse la inmovilización social obligatoria en el marco de la epidemia de coronavirus en un local ubicado en la cuadra 2 de la avenida El Zinc.
La ‘discoteca de la muerte’ donde 13 personas fallecieron asfixiadas la noche del sábado tenía licencia de funcionamiento, pero bajo el rubro de empresa textil, por lo que el local funcionaba clandestinamente y según vecinos que viven en los alrededores, esta realizaban fiestas y hasta conciertos con orquestas en vivo sin los protocolos de sanidad obligatorios. El empresario dueño del lugar aún no es identificado y habría escapado del local apenas vio a la policía llegar para la intervención.
Esta irresponsabilidad ha sido calificada por la Ministra de la Mujer, Rosario Sasieta, como un homicidio doloso, un asesinato premeditado, ya que por el estado de emergencia sanitaria las discotecas y bares están prohibidas de atender al público, tampoco no se pueden realizar reuniones familiares ni amicales.
Expertos en materias legales han indicado que el dueño de la discoteca ‘Thomas Restobar’ podría ir hasta 35 años a la cárcel acusado de asesinato culposo.
En los videos enviados a nuestra redacción a través de nuestras redes sociales y WhatsApp se puede observar la desesperación de decenas de jóvenes que tratan de reanimar a sus amigos que se encuentran tirados en el piso inconscientes, al parecer afixiados por la turba que intentó escapar de la discoteca cuando la Policía Nacional les pidió que se pusieran en orden para ser llevados hasta la comisaría del sector.
En el piso de la discoteca también se puede ver varias cajas y botellas de cerveza regadas por todo el lugar, mientras que una voz gritaba desesperado para que se atienda a los jóvenes que no volvían en sí.
En otro video se observa a una joven, de no más de 20 años, sobre una camioneta llorando desconsoladamente ante los cadáveres de sus amigos y pedía que puedan trasladarlos de una vez, mientras otras personas le reclamaban a la policía que no hacían nada por rescatar a las demás víctimas de la tragedia.
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