Terrible muerte. Furiosos por el asesinato de un taxista y cansados de la inseguridad ciudadana, pobladores del distrito de Anra (provincia de Huari) quemaron vivos a tres sospechoso de cometer el crimen, en la provincia de Áncash.
El jefe de la Policía de Áncash, general Juan Sánchez, informó que la población buscó una venganza por la muerte del taxista Williams Arrieta (26), quien fue asesinado el miércoles para robarle su carro.
Añadió que la población buscó a los homicidas y encontró a tres sospechosos ocultos en una cueva.
Estas tres personas, cuyas identidades se desconocen, fueron azotadas, golpeadas salvajemente y luego bañadas con gasolina. La población de Anra no soportó la pérdida de Arrieta y le prendieron fuego a los tres sujetos, cuando aún estaban vivos.
La policía de Áncash encontró los cadáveres y los trasladó a la morgue central de Huaraz, donde se espera que puedan ser identificados.
Este terrible castigo ha causado conmoción en la población de Áncash.
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