El gobierno austríaco anunció el lunes que demolerá la casa donde nació Adolf Hitler, donde construirá otro inmueble para borrar cualquier vínculo con el lugar natal del dictador.
El plan, que aún debe ser formulado como proyecto de ley y votado en el Parlamento, fue recomendado por una comisión del gobierno, dijo el ministerio del Interior.
Dado que el Partido Socialdemócrata y el Partido Popular de centro tienen la mayoría y se prevé que los partidos de oposición apoyarán el plan, la aprobación probablemente será una formalidad.
El ministro del Interior, Wolfgang Sobotka, explicó que "es necesaria una remodelación arquitectónica total para impedir permanentemente el reconocimiento y el simbolismo del edificio".
El vocero del ministerio, Karl-Heinz Grundboeck, dijo que eso significa en los hechos que de la casa, en la población occidental de Braunau, nada quedará sino los cimientos y que en su lugar se construirá un inmueble nuevo.
Según un comunicado oficial enviado por correo electrónico a The Associated Press, Sobotka dijo que quiere eliminar cualquier asociación con Hitler en el lugar, que ahora suele ser un centro de peregrinación nazi. Añadió que el nuevo edificio alojará oficinas de gobierno o de agencias de planes sociales.
El gobierno inició un proceso legal este año para expropiar la propiedad, cuya dueña se negaba a venderla o a permitir renovaciones que redujeran su impacto simbólico como lugar de nacimiento de Hitler, así como su atractivo para los admiradores del Führer.
El comunicado dice que el Ministerio del Interior planea elaborar el proyecto de ley y someterlo a votación en el Parlamento en lo que resta del año.
La comunidad judía vienesa y un centro de investigaciones antinazi apoyado por el gobierno apoyan la demolición del imponente edificio amarillo de tres pisos donde nació Hitler el 20 de abril de 1889.