Decenas de venezolanos dejaron a sus familias, trabajo, casa y su país, para huir de la crisis económica y han venido al Perú para ganarse la vida.
Están en Gamarra, Jirón de la Unión, Paseo de los Héroes Navales y otros puntos de Lima, incluso en algunas playas.
‘¡Areeeepa, areeepa. Pruebe su rica arepa, desde Venezuela!’, dice Patricia Rodríguez, quien en Caracas trabajaba como técnico petrolero.
Cada arepa, empanada con masa o harina de maíz, cuesta entre 2.5 y 5 soles. También venden limonada y vasos de heladita tizana (típica bebida venezolana, con trocitos de frutas como fresa, piña, naranja, manzana y zumo de naranja) a 2 soles.
Trome encontró en Gamarra a Vanessa, Patricia y otros venezolanos. “Gracias a ‘Maduro’, ahora somos extranjeros ambulantes”, contaron.
Andrea Sayago (24), una especialista en comercio exterior que trabajaba como corredora de seguros, ahora es mesera en una cebichería de Gamarra.
TOME EN CUENTA
También hay venezolanos trabajando en atención y limpieza de restaurantes y pizzerías, peluquerías y otros negocios. Hay varios abogados, médicos e ingenieros.
La arepa es una tortilla a base de masa de maíz molido o de harina de maíz precocida, en forma aplanada con dos caras circulares. Es típica de Colombia, Panamá y Venezuela.