Sigue el problema, tras la demolición del terminal de Fiori. Aunque la madrugada de ayer (jueves), tras violento desalojo, agentes de la Policía Nacional y de la municipalidad de San Martín de Porres retiraron a los transportistas y comerciantes del terminal terrestre de Fiori, no han conseguido que el problema de la informalidad se detenga.
Resulta que se han trasladado a una zona aledaña, la calle Miguel Ángel, donde aunque los buses sean formales, el paradero no lo es por lo que el servicio sigue siendo informal. Sin embargo, el público lo sigue usando.
“Esto es un caos, no son carros, son buses enormes que entran y salen, que generan ambulantes, bulla, tráfico. Solo se han movido unos 200 metros y ahora allí operan varias empresas. Los pasajes los venden sobre una mesa en plena vía”, se quejó un vecino.
ALTERNATIVA TERMINAL DE PLAZA NORTE
Cerca del ex terminal de Fiori se ubica el Terminal Terrestre de Plaza Norte, que es formal, ordenado y ofrece medidas de seguridad. Sin embargo, al parecer los transportistas del terminal demolido y su público no están de acuerdo porque señalan que ahí se rigen de horarios y no pueden tomar los buses cuando quieran.
"No nos dejan trabajar. La autoridad competente no ha venido y no nos han organizado para trasladarnos al terminal de Lima Norte. Nadie. El fiscal vino pero no verificaron los derechos humanos de los trabajadores", dijo un transportista al noticiero América Noticias.
Por su parte, Edgar Cayo, gerente de terminal Plaza Norte, aseguró: "Tenemos la capacidad para recibir buses”. "Para operar exigimos que la empresa sea formal, cuente con todas las autorizaciones. Una vez que operan en nuestro terminal, el pago es mediante a pasajero embarcado".
Explicó que han invitado a los transportistas de Fiori a llevar sus buses y que la instalación es gratuita para empresarios y el sistema que ofrecen les hace pagar no un monto fijo por alquiler del espacio sino un monto flexible según el número de pasajero que suba a cada unidad por viaje.
REGRESAR A LA PORTADA DE TROME.PE