Detectives de Homicidios de la Dirincri retuvieron a un adolescente de 17 años, sobrino de Segundo Apaza Polloqueri (32), expareja y principal (29), porque estaría involucrado en el macabro hecho.

Para los investigadores, el menor es pieza clave, pues vivió en la casa, en la agrupación familiar Palmeiras de Huáscar, San Juan de Lurigancho, desde el inicio de la pandemia.

Segundo Apaza se fue de la vivienda hace dos semanas, llevándose a sus hijos, y dos días después hizo lo mismo el sobrino.

“María, una amiga de Marleny, la dejó en la puerta de su casa (el domingo 12 de julio), tras celebrar el cumpleaños de una conocida. Ahí estaban Segundo y ese joven que dormía en un cuarto frente al de Marleny”, dijo Jimena García, abogada de la familia Estrada. Ese fue el último día que vieron a la joven.

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AYUDABA A SU TÍO

Se supo que el adolescente ayudaba a su tío en sus trabajos de costura.

El cuerpo de Marleny fue descubierto casi dos meses después de su desaparición. Estaba enterrado en su habitación, donde hicieron un hueco. Lo cubrieron con cemento y mayólicas nuevas.

“Es imposible que una sola persona haya hecho todo este trabajo. El asesino tuvo que recibir la ayuda de alguien para romper el piso y sacar la tierra”, sostuvo la letrada.

Detectives de la Dirincri interrogan intensamente al menor, quien también sabría el paradero de Segundo Apaza. (M. Flores)

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