Alejandro Toledo seguirá afrontando, desde la cárcel de Santa Rita (California, Estados Unidos), el proceso de extradición en su contra, pues el juez federal Thomas Hixson rechazó el pedido de libertad bajo fianza. Eliane Karp, esposa del expresidente, empezó a gritar e insultar, por lo que tuvo que ser retirada a rastras de la audiencia.
“Voy a negar la reconsideración (de la fianza) porque Toledo no ha demostrado que no hay riesgo de fuga”, afirmó el magistrado, quien dijo que el exmandatario ‘es un individuo con gente a su alrededor con conexiones y mucho dinero’.
Hixson agregó: “No es tanto que Odebrecht le dio dinero, sino que el dinero fue entregado a través de muchas personas... Si alguien huye, la corte no quiere la casa ni el dinero (que se habían ofrecido como fianza), sino a Toledo”.
MILLONES
En la audiencia, la fiscal Elise LaPunzina indicó sobre Toledo que ‘existen millones de dólares, de los cuales se desconoce su paradero’. Cuestionó que el exjefe de Estado pague 6 mil 400 dólares mensuales por el alquiler de su vivienda y reveló que en julio último expresó sus deseos de irse a Israel, lo que acrecienta el riesgo de fuga.
Por su parte, Graham Archer, abogado de oficio de Toledo, aseguró que su defendido no iba a escapar y que viene afrontando un encierro carcelario muy riguroso, de solo una hora de patio al día.
A RASTRAS
Ni bien el juez Hixson dio su veredicto, Eliane Karp dijo en un suspiro y exclamó: ‘¡Shit!’ (mier...). Luego se alteró aún más y empezó a gritar: ‘¡You’re killing him!’ (Lo están matando).
Totalmente fuera de sí, la ex primera dama siguió vociferando: ‘Ustedes serán moralmente responsables por su muerte’. Esto fue motivo para que los agentes de seguridad la inviten a retirarse.
Karp no hizo caso y aseguró que ‘no se iba a ir’. Ante esta situación, fue cogida de los brazos y sacada a rastras de la sala.
La siguiente audiencia de este caso se realizará el jueves 17 de octubre. Aquí se hará un balance de la salud de Toledo y se vería si es trasladado a un recinto penitenciario con menos población penal.