Era uno de los hombres ‘más buscados’ y se ofrecían 100 mil soles por su captura, pero una peluca lo ayudó caminar de incógnito por las calles durante casi seis meses. Con esos mechones postizos, que cubrían su cabeza atacada por la calvicie, el general (r) Edwin Donayre Gotzch (67) se convirtió en un escurridizo prófugo de la justicia.
La peluca, hallada en su mochila, sería la misma que usó en mayo del 2018, cuando aún era congresista, para ingresar disfrazado al Lugar de la Memoria (LUM), filmar un video y denunciar supuesta apología al terrorismo.
Luego de su captura en Puente Piedra, cuando salía de una tienda donde había realizado una llamada telefónica, Donayre fue trasladado a la División de Requisitorias de la Policía Nacional, donde permanece en un ambiente aislado.
OPERATIVO
Su abogado, Hugo Gutiérrez, alega que el excomandante general del Ejército se entregó, pero la Policía aclara que su captura fue producto de un bien montado plan de tres meses a cargo de la Dirección de Inteligencia (Dirin).
5 AÑOS Y 6 MESES
Según las pesquisas, Donayre estuvo escondido en Ayacucho y Carhuaz (Áncash), pero luego se trasladó a Lima, donde era requerido por la justicia para que cumpla los 5 años y 6 meses de cárcel por el robo de 2 millones 571 mil soles en combustibles, cuando era comandante general de la Región Sur del Ejército.
Ayer, su esposa le llevó ropa y comida. Su abogado, quien pidió que lo trasladen al Hospital Militar, indicó que “psicológica y físicamente está mal, sufre de artrosis, reumatismo, diabetes y dolencias cardiovasculares”.