Conoce 3 soluciones que brinda la tecnología a la agricultura para disminuir el impacto ambiental

En un contexto donde la demanda de productos agrícolas se incrementará entre un 60 y 70 % en el 2050 a raíz del incremento poblacional, según datos de la Organización de las Naciones Unidas, la tecnología se muestra como una aliada, pues no solo permite aumentar la productividad, sino cuidar el planeta tierra.

De esa forma la tecnología representa un soporte para acompañar los procesos como, por ejemplo, cultivo y riego del agricultor a fin de que estos sean óptimos, fructíferos y sostenibles. Rodrigo Tissera, cofundador de Kilimo, agrotech que monitorea el riego en los cultivos, menciona 3 formas en las que implementar la tecnología en la agricultura bajo riego, contribuye a cuidar el planeta en el que vivimos.

• Ahorro del agua: Existen tecnologías que le brindan al agricultor datos exactos sobre cuánto tiene que regar sus cultivos, lo que permite ser más eficientes en el uso del agua para riego agrícola y lograr ahorros de este recurso. Cada vez es más frecuente hallar plataformas, como Kilimo, que brindan recomendaciones personalizadas valiéndose de información técnica del campo. A través de estas tecnologías, los agricultores pueden llegar a ahorrar hasta un 20% de este recurso hídrico, dependiendo del cultivo.
• Menor contaminación de los suelos agrícolas: El uso excesivo de fertilizantes y pesticidas tienen un impacto negativo en el suelo agrícola y microfauna, por lo que cada vez es más frecuente hallar tecnologías agrícolas que buscan eficientizar el uso de fertilizantes y pesticidas en los cultivos. De esta manera no solo se contribuye con la disminución del impacto ambiental, sino con la calidad de los productos que llegan a la mesa del consumidor final.
• Disminución del uso de energía eléctrica: En línea con el ahorro de agua y disminución de fertilizantes, la implementación de tecnología en la agricultura permite la disminución del uso de energía eléctrica en el proceso productivo. El especialista explica que al usar menor cantidad de agua y fertilizantes, el uso del equipo de riego es menor, provocando un ahorro de recursos en la producción y un mayor cuidado del planeta.