Alguna vez has estado en la situación de preguntar: ¿cómo se llama esa película en la que sale esa actriz rubia, de pelo largo, que una vez salió en esa otra película de acción con el actor ese, alto, medio pelado? ¿Sabes de quien hablo, no?
MÁS INFORMACIÓN:¿Quieres aumentar tu memoria? Ejercita tu cerebro con estos consejos
Se dice que a partir de los 30 años empezamos por lo general a tener pequeños olvidos. Los pequeños olvidos son ocasionales, no son de importancia y tienen una evolución lenta.
Están relacionados con la recuperación de información que ya tenemos almacenada previamente y no nos impiden realizar actividades cotidianas como cocinar, bañarnos o vestirnos.
Por ejemplo, no recordamos dónde dejamos las llaves, la palabra precisa para terminar un mensaje, el día que es, u olvidamos algunas cosas que teníamos que comprar o dar un recado a alguien.
Ante este tipo de olvidos no debemos preocuparnos porque no se acompañan de otros déficits cognitivos. Pero aunque no afectan nuestra vida, de todos modo terminan generándonos ansiedad.
El nutriólogo Gerardo Bouroncle Mc Evoy, de Corpolineal, señala que las personas equivocadamente relacionamos edad con falta de memoria o de algún nutriente.
“Los neurólogos han comprobado que la pérdida de memoria a corto plazo no se debe a la edad o a que las neuronas se mueran y no se regeneren, sino a la reducción del número de conexiones entre ellas”, explica.
¿Qué debemos hacer entonces?
El especialista recomienda lo siguiente:
* Intenta una vez por semana ducharte con los ojos cerrados. Solo con el tacto, localiza el jabón, las llaves del agua, el champú. Notarás texturas que nunca habías percibido.
* Utiliza la mano que no dominas de vez en cuando (si eres diestro usa la izquierda). Come, escribe, lávate los dientes, abre ese cajón con la mano que más te cuesta usar.
* Lee en voz alta. Se activan distintos circuitos de los que usas para leer en silencio.
* Cambia la ruta por donde vas a trabajar, o para regresar a tu casa.
* Modifica tu rutina. Haz cosas diferentes, sal, conoce y conversa con personas de diferentes edades, trabajos e ideologías. Sal al campo, camina huele el aire puro.
* Usa las escaleras en lugar del ascensor.
* Cambia la ubicación de algunas cosas. Al saber donde está todo, el cerebro hace un mapa. Cambia por ejemplo, el tacho de basura y te darás cuenta de que instintivamente botas el papel en el mismo sitio.
* Aprende una habilidad, como tomar fotos, cocinar, hacer yoga, aprender un nuevo idioma o armar rompecabezas. Haz un experimento y tápate un ojo, esto hace que el cerebro pierda percepción en la profundidad, el cerebro tendrá que usar otras vías de conexión.
* Identifica objetos como monedas, botones, o cualquier otro similar, esto hará que distingas uno de otro. Asimismo, poner diferentes monedas de distinta denominación, agudiza la percepción y la memoria.
TE PUEDE INTERESAR: