Un minimarket fue clausurado porque en pleno operativo, a cargo de personal de fiscalización de la Municipalidad de Cieneguilla, su propietario trató de esconder los cigarrillos de contrabando que ofrecía al público.
En el marco de las acciones para luchar contra el comercio ilegal y salvaguardar la salud de los consumidores, las autoridades realizaron un recorrido por varios negocios del distrito.
Fue así que se descubrió que en los minimarket ‘La Cañetana’ y ‘Arroyo’ había cientos de cajetillas de cigarrillos ilegales, que no contaban con las advertencias sanitarias aprobadas por el Ministerio de Salud.
En su afán por evitar que decomisen su mercadería, el encargado de minimarket ‘Arroyo’ trató de esconder sus productos ilegales, por lo que además de la multa se procedió a la clausura del local.
En tanto a la propietaria del local ‘La Cañetana’ se le hizo una advertencia sobre las consecuencias de comercializar productos de contrabando, delito que es sancionado hasta con ocho años de prisión.
Asimismo, las autoridades descubrieron que varias bodegas de las avenidas Santa Rosa y San Martín comercializaban cigarrillos de dudosa procedencia, por lo que se hizo un llamado de atención a los encargados y anunciaron que harán un seguimiento para verificar que cumplan la ordenanza municipal 313-2020.
De otro lado, agentes de la Dirección de la Policía Fiscal decomisaron cientos de cigarrillos de procedencia extranjera en el minimarket ‘Jola’ y en un puesto del mercado Food Market, de la zona de Casuarinas en Surco.
Las autoridades indicaron que la mercadería ilegal es de procedencia paraguaya y habría ingresado al país a través de la frontera con Bolivia.