El servicio del Metropolitano contará en breve con un nuevo modelo de bus articulado diseñado con los más altos estándares de calidad y seguridad que estará equipado con aire acondicionado, cámaras de seguridad, puertos de carga USB y puertas con sensores de antiaplastamiento, informó la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU).
Asimismo, se conoció que este nuevo y moderno bus articulado iniciará en tres meses un periodo de prueba con público.
El bus, que formará parte de la flota de Lima Bus Internacional, una de las empresas concesionarias del Metropolitano, está equipado con un sistema de combustible de Gas Natural Vehicular (GNV) de última generación y cumpliendo con la normativa EURO 6, lo que lo posiciona como un referente en sostenibilidad.
Durante la ceremonia de presentación del bus, el presidente ejecutivo de la ATU, José Aguilar, destacó la disposición del concesionario para renovar la flota de vehículos. “A la par con el crecimiento del Metropolitano, es importante que las empresas apuesten por mejores buses en favor de los usuarios”, afirmó.
A su turno, José Luis Diaz León, gerente general de Lima Bus Internacional, señaló que el período de prueba de este nuevo bus será hasta fin de año y que luego el objetivo es ir reemplazando toda la flota, que comprende 78 unidades.
CAPACIDAD PARA 164 PASAJEROS
La unidad se caracteriza principalmente por contar con un moderno sistema de aire acondicionado y purificador de aire para eliminar los microbios del ambiente. Además, cada una de las puertas contará con un sistema de cortaviento.
Con 18.5 metros de largo, 2.56 metros de ancho y 3.33 metros de altura, la unidad podrá trasladar a 164 pasajeros (47 de sentados y 117 de pie). Ocho de los asientos son preferenciales y cada uno de ellos tiene cinturones de seguridad.
Además, habrá un espacio para un usuario en silla de ruedas. Cabe señalar que, a través de un sensor, se dará aviso al conductor cuando este pasajero haya terminado de ponerse el cinturón de seguridad.
CON MÁS SEGURIDAD
Otra gran diferencia con los actuales buses es que la nueva unidad cuenta con dos cámaras de seguridad en el interior y una cámara de retroceso, cuyas imágenes podrán ser monitoreadas por el conductor. Se suma a ello que cada puerta cuenta con un sensor de antiaplastamiento a fin de evitar que algún usuario quede atrapado al momento de subir o bajar del vehículo.
Asimismo, cuenta con 11 salidas de emergencia: siete a través de las ventanas y cuatro por las claraboyas (en el techo). Se suma a ello que el bus tiene 18 puertos de carga USB para los pasajeros e iluminación LED en el interior y exterior.
El bus ha sido fabricado por la empresa Motores Diesel Andinos S. A. (Modasa), que realizó pruebas exhaustivas en carretera para evaluar el comportamiento estructural de la unidad como los componentes de la carrocería. La empresa señaló que el vehículo está diseñado conforme a los requerimientos mínimos para la resistencia de la superestructura (Regulación N.° 66 de las Naciones Unidas) y todos los definidos por las autoridades peruanas de transporte.