La inclusión de personas de la tercera edad en el mercado laboral es esencial para una sociedad igualitaria. Los adultos mayores aportan una riqueza de experiencia, sabiduría y compromiso que enriquece a las empresas y promueve una cultura laboral más inclusiva. Al darles la oportunidad de contribuir, no solo estamos aprovechando su vasta experiencia, sino también fomentando la diversidad generacional y combatiendo la discriminación por edad.
“En nuestro país, de los 40 hacia adelante se va haciendo más difícil encontrar un trabajo, esto sucede porque algunas empresas tienden a pensar que las personas mientras más edad tengan son más difíciles de adaptar o de seguir indicaciones de otro profesional que podría ser mucho más joven. Esto también depende del sector, por ejemplo, en salud y educación las personas mayores son consideradas referentes, sin embargo, en los negocios relacionados con la tecnología, ventas, marketing etc. parecería que fuera un sector dado solo para gente joven”, afirma la Dra. María Elena Escuza, directora de la EAP de psicología de la Universidad Norbert Wiener, potenciada por Arizona State University, elegida durante nueve años consecutivos como el número 1 en innovación en Estados Unidos.
“Las personas de la tercera edad representan una gran sabiduría debido a que suelen tener una experiencia laboral no menor a 15 años, lo que les brinda capacidades para desempeñarse como supervisores, gerentes, consultores, organizadores de congresos y/o eventos, asesores, profesores, entre otros puestos, en los cuales se aproveche de su gran experiencia. Asimismo, suelen tener mayor estabilidad laboral, debido a que entienden que las oportunidades de trabajo son restringidas”, menciona el Dr. Leoncio Sánchez Roque, docente de la carrera de Administración y Negocios Internacionales de la Universidad Norbert Wiener.
Teniendo en cuenta ello, los especialistas dan a conocer los múltiples beneficios de incluir a personas de la tercera edad en los equipos de trabajo:
1. Aportan experiencia y sabiduría: Las personas mayores aportan una riqueza de experiencia y conocimiento acumulado a sus funciones laborales, debido a que han enfrentado una variedad de desafíos a lo largo de sus vidas, así como han desarrollado habilidades valiosas para la resolución de problemas y la toma de decisiones ante situaciones imprevistas que se presenten.
2. Se enfocan en la estabilidad y el compromiso: Las personas de la tercera edad, a menudo, buscan estabilidad laboral y tienden a ser altamente comprometidas con sus trabajos. Su lealtad a largo plazo y su enfoque en la calidad del trabajo pueden contribuir a un ambiente laboral más estable y productivo.
3. Ideales para la mentoría y el desarrollo de talentos: La inclusión de personas mayores en el lugar de trabajo crea oportunidades naturales para la mentoría intergeneracional. Pueden compartir sus conocimientos y experiencia con empleados más jóvenes, fomentando el desarrollo de talento y la transferencia de habilidades clave.
4. Promueve la diversidad laboral: La diversidad generacional impulsa la innovación y la creatividad. Las diferentes perspectivas y enfoques generacionales pueden llevar a soluciones más equilibradas y efectivas en el trabajo en equipo.
5. Contribuye a la sociedad: La inclusión de personas de la tercera edad en un ambiente laboral también es un acto de responsabilidad social empresarial. Ayuda a combatir la discriminación por edad y demuestra el compromiso de la organización con la igualdad de oportunidades para todas las edades.
Según un informe elaborado por el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, en el 2021, la población en Edad de Trabajar (PET) adulta mayor de 60 años a más fue de 3 millones 708 mil 318 personas, de las cuales 1 millón 887 mil 557 conformaron la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada. Asimismo, la tasa de desempleo adulta mayor ascendió a 2,7%.