Sabiendo que existe una demanda considerable de personas deseosas de certificados de vacunación falsos contra la , un sujeto de Eslovenia decidió vacunarse hasta en siete ocasiones para así poder vender, a buen precio, estos comprobantes falsificados. La de esta persona indignó a miles de usuarios de tras convertirse en .

Un negocio fugaz

Sus clientes eran personas que necesitaban hacer viajes fuera del país, así como ingresar sin problemas a diversos espacios de alta concurrencia. El negocio comenzó con buenos aires, pero esta buena racha no le duraría mucho, pues pronto fue descubierto por las autoridades.

El sujeto, cuya identidad no se conoce, fue llevado a juicio y condenado a 10 meses de prisión por dos cargos: vacunarse 7 veces contra el coronavirus (2 veces de forma legal, 5 de manera ilegal, con dosis de diversos laboratorios), además de vender certificados de vacunación falsos a cuatro personas.

El sujeto recibió dosis de varios laboratorios. (Foto: AFP)
El sujeto recibió dosis de varios laboratorios. (Foto: AFP)

La justicia dictaminó que, a pesar de la pena privativa de la libertad, también deberá pagar unas multas entre 1,600 y 2,500 euros.

¿Por qué vendía certificados de vacunación falsos?

Hoy sabemos que esta persona no tenía una posición económica estable, por lo que decidió ofrecer certificados falsos, siendo descubierto en diciembre 2021 por trabajadores del centro médico donde fue a inocularse por octava vez,

De acuerdo a lo informado al diario Delo de Liubliana, las personas que le pagaron por vacunarse ilegalmente recibieron castigos y multas mucho más leves, por lo que los trabajadores que denunciaron el hecho consideraron que esto es una injusticia, explicando que el hombre se vio orillado a cometer este delito debido a su precaria condición económica.

Fue descubierto y denunciado por personal médico del centro de vacunación al cual acudió para ponerse la octava dosis. (Foto: AFP)
Fue descubierto y denunciado por personal médico del centro de vacunación al cual acudió para ponerse la octava dosis. (Foto: AFP)

Entre sus argumentos para asegurar esto es que las personas que le pagaron también pusieron en riesgo la salud del hombre de forma deliberada y arbitraria.

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