Chile superó este sábado las 10.000 muertes por el coronavirus, cinco meses después del primer caso registrado en el país, y a una semana de que el gobierno inicie un plan de desconfinamiento en Santiago, informó el Ministerio de Salud.
En las últimas 24 horas, se contabilizaron 53 nuevas muertes, lo que lleva la cifra de fallecidos por el COVID-19 a 10.011 confirmadas por exámenes PCR. Y en el mismo periodo se declararon 2.201 casos, por lo que se produjeron 371.023 contagios por coronavirus desde el inicio de la epidemia, indicó el informe presentado por el ministro de Salud, Enrique Paris.
Pero la cifra de fallecidos por el virus en Chile alcanza a los 13.426 si se incluyen los casos de muertes sospechosas, siguiendo los criterios de la Organización Mundial de Salud (OMS).
De esta manera, Chile, con una población de 18 millones de personas, alcanza un promedio de 523,7 muertos por millón de habitantes, una cifra superior a los 468,4 fallecidos por millón de habitantes de Brasil.
El gigante sudamericano de 212 millones de habitantes es el país más afectado de Sudamérica, con casi 100.000 fallecidos por COVID-19, y es el segundo del mundo con más contagios, cerca de tres millones, por detrás de Estados Unidos (4,8 millones de infectados), según datos de la Universidad John Hopkins.
Con cifras de contagio a la baja desde al menos tres semanas, más de 344.000 recuperados y una positividad de los exámenes PCR que no supera el 9% a nivel nacional, las autoridades chilenas iniciaron la semana pasada una etapa de transición para el desconfinamiento de siete comunas de Santiago (donde viven 7 millones de personas) y dos en la vecina región de Valparaíso que se encontraban en cuarentena.
El gobierno informó que el próximo lunes otras ocho comunas chilenas iniciarán el proceso de desconfinamiento. En tanto, la comuna de Punta Arenas (sur), que no estaba en cuarentena, volverá al confinamiento por el aumento de casos.
El coronavirus golpeó también la economía chilena que, según las previsiones oficiales, cerrará este año con una contracción del 7,5%, mientras que la pobreza llegará a un 13% de la población.
El desempleo alcanzó, por su parte, un 12,2% en el trimestre abril-junio, el nivel más alto en una década.
Fuente: AFP
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