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Las Islas Cook pasaron de ser un paraíso donde podemos vacacionar para convertirse en el edén donde no existe el COVID-19. A dos años de la aparición del coronavirus en el mundo, este país ubicado en el océano pacífico ha logrado estar libre de contagios y muertes de manera casi perfecta.

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Y decimos ‘casi perfecta’ si no fuese por el anuncio de un posible caso de covid en un niño de 10 años que llegó al país proveniente de Auckland (Nueva Zelanda) que puso en alerta al gobierno a inicios de diciembre, según relata .

Esta alarma provocó que muchos negocios cerraran sus puestos al paso que el gobierno se preparaba para tomar medidas drásticas, ya que este archipiélago solo cuenta con 22 médicos y dos respiradores artificiales.

Más adelante las mismas autoridades anunciaron que el caso del niño había dado un falso positivo. Las dos primeras pruebas que le hicieron al menor arrojaron pruebas de COVID-19 débiles positivas, mientras estaba en cuarentena. Un tercer test confirmaría el caso como negativo.

“Tenemos la suerte de que nuestros protocolos de entrada detectaron este posible caso, y hemos seguido nuestros protocolos alcanzando este resultado satisfactorio. Pero también enfatiza la necesidad de permanecer alerta”, señaló en su momento el secretario de Salud, Bob Williams.

En la actualidad, los habitantes de este país viven con libertades pre pandémicas, puesto que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha catalogado como libre de COVID-19. Sin embargo, esto no significa que el virus no los haya golpeado económicamente. Las islas Cook dependen del turismo.

A penas se enteraron de los primeros casos de contagio, cerraron todas sus fronteras, lo que llevó a devastadoras complicaciones, ya que dos tercios de su PBI dependen del turismo.

A principios de diciembre, el gobierno había anunciado que desde enero del 2022, abrirían las fronteras y permitirían el ingreso de viajeros internacionales desde Nueva Zelanda, pero esta reapertura no se volvió a confirmar luego que el gobierno de Auckland comenzara a informar casos de la variante delta.

Según describe La Nación, las Islas Cook fueron reconocidas como el mejor destino turístico para visitar en 2022 por la guía Lonely Planet. Los jueces de estos premios elogiaron a la nación por la creación del parque marino Marae Moana.

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